domingo, 19 de septiembre de 2010

Sensaciones etílicas.


Hielo seco flotando en la atmosfera dentro de un cuarto obscuro cuya única luz neón sale de un rayo que se sostiene por la parte superior de la pared, las parejas bailan y los solitarios sentados disfrutan de la noche, mientras que otros examinan las curvas que quieren conquistar ; en unos va en serio, otros sólo quieren facilidades. Los bebederos rompían esquemas, la barra cristalizada sirve ríos de alcohol. Así es como pude ver la situación que hablo.
Por muy extraño que parezca, entré a un antro (karaoke-bar) por la calle Acoxpa que está por uno de los tacos más famosos de la ciudad de México (tiene su historia también pero ese es un punto y aparte). Copa&Capana, y la verdad, sigue la cuestión con la que he dejado ya que me aburre demasiado y además tiene que ver con la sociedad pero ¿Qué es lo que la gente o la sociedad ve en esos lugares?
Suelen decir que la presión del trabajo y de la escuela hacen el pretexto perfecto para ir a emborracharse y que al otro día sufrir las consecuencias pero, a pesar de todo eso no entiendo el motivo por el cual ¿Cómo pueden ir a gastar dinero para comprar una botella o exhibirse ante los demás? Sigo sin entender el pensamiento de los adolescentes, no sólo de ellos sino que también hay personas mayores que han vivido con esa mentalidad pero, junto a toda esa conducta me hace pensar la aberración por la complejidad social pero, lo que pude contestar respecto al problema planteado, anteriormente, fue por la razón de la sociedad, una costumbre más que ha hecho a la sociedad rústica e impasible de conocimiento. Es una pena decirlo, sin embargo el resultado siempre suele ser en cuestiones social.

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